A juicio de Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de Enfermería del Distrito Capital, en Venezuela se pasó de una crisis humanitaria a “una catástrofe humanitaria”, al tiempo que advirtió que para finales de 2019 se esperara una renuncia “masiva” del personal en todos los hospitales del país, debido a los salarios que perciben.
En entrevista a “El Toque de Diana”, Ana Rosario Contreras, expresó que “quien no conoce el gremio, solo ve el colapso de las infraestructuras”, pero detrás de la enfermera o médico “hay un ser humano, que tiene una familia que mantener”.
Denunció que en Venezuela, los dirigentes que protestan son objetos de persecución y amedrentamiento por parte de los cuerpos de seguridad. “En las calles se pueden encontrar licenciadas en enfermería vendiendo café o empanadas. Profesionales, pero que en este momento tenemos que vivir. Actuamos como oficios, porque nos permite llevar algo a la casa”, dijo.
Exigencias salariales del gremio de los enfermeros
Para Ana Rosario Contreras, en Venezuela existe un “divorcio” entre el salario mínimo y la hiperinflación, por lo que este gremio pide que se indexe el salario mínimo a la hiperinflación. “Presentamos a la vicepresidencia una propuesta salarial en dólares, el personal de la enfermería no está dispuesto a seguir trabajando de gratis. Pedimos para el licenciado 600 dólares y para el técnico superior 400 dólares. Es una economía tan fuerte que hasta los dólares los estamos devaluando”.
Anunció que hasta la fecha, hay 18 estados del país que manifestaron su compromiso con el paro de 24 horas anunciado por las enfermeras. “En Caracas tenemos 6 hospitales dispuestos a sumarse al paro y los puntos de concentración se anunciarán el día martes”, expresó. Advirtió que sí hay posibilidad de extender el paro.
“El año pasado hubo una sumatoria de todos nuestros hermanos de salud, pero esperamos una sumatoria espontánea. Es momento de entender que la situación no la resolverá un mesías, sino todos los venezolanos”, expresó Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de Enfermería del Distrito Capital.
David Peñaranda